Nos sumergimos de lleno en el verano y queremos que nuestras uñas luzcan impecables durante nuestras vacaciones. Para mantenerlas perfectas sin tener que retocarlas continuamente, apuesta por la manicura semipermanente. Eso sí: sigue nuestros consejos para proteger y alargar tu esmalte.
Manicura semipermanente: cuidados básicos en verano
La manicura semipermanente (y pedicura) es increíblemente práctica y cómoda. Dura unas tres semanas y posee un brillo inigualable. Si quieres disfrutar de tus vacaciones y presumir de unas manos perfectas sin preocuparte, es sin duda la opción ideal. De todos modos, el sol, el calor, la sal del mar o el cloro de las piscinas no son precisamente grandes aliados de este tipo de esmaltes. Pero puedes defenderte de ellos siguiendo nuestras recomendaciones. Así evitarás que tu manicura se pele o se agriete.
Elige bien tu manicura semipermanente
¿Prefieres hacerte la semipermanente tú misma en casa o que te la haga una profesional? Ambas opciones son válidas. No obstante, tienes sus pros y sus contras. Al estar tan de moda la manicura semipermanente, muchas personas deciden empezar a hacerlo, sin tener apenas conocimiento sobre ello; si te las hace alguien, que sea de confianza o en un centro homologado y con materiales desinfectados tras cada servicio. Si, por el contrario, decides hacértelas tú en casa, escoge siempre una marca que tenga productos de calidad, evitando así problemas a largo plazo.
Ten en cuenta el color
Es fundamental que tengas en cuenta que el sol, el cloro y la sal estropean los colores. Si en tus vacaciones vas a pasar mucho tiempo en la playa o en la piscina, ten en cuenta el tono que vas a elegir para tu manicura permanente. Por ejemplo, gamas claras como el rosa pálido, el perla o el blanco tienden a perder el brillo y la potencia. En este sentido, recomendamos utilizar colores más intensos y oscuros como el coral, el rojo ferrari, el azul pastel, el verde esmeralda o cualquier tono neón.
Cuida tus uñas
Como hemos comentado, tanto el salitre como el cloro pueden provocar que tu manicura permanente –y también tus cutículas- se deteriore. Así pues, no te olvides de secarte muy bien las manos y las uñas inmediatamente después de salir del agua. Por otro lado, hay que tener en cuenta que el esmalte tiene un enemigo adicional: la crema de protección solar. A este respecto, los expertos coinciden en que, al aplicar estas cremas, hay que asegurarse de no dejar ningún residuo sobre la superficie de las uñas. Lávalas para proteger el brillo y el color.
Y, por supuesto, practica la hidratación continua. Usa una buena crema de manos con frecuencia tras secarlas muy bien. Nunca está de más aplicar también un aceite de cutículas para cuidarlas, mantenerlas hidratadas y suaves, evitando así que se resequen. Hay que recordar que el deterioro de las cutículas afecta directamente a nuestra manicura semipermanente.
En resumidas cuentas: di que sí a la manicura permanente. Sigue estas recomendaciones y visita nuestra tienda online para hacerte con los mejores productos del mercado a precios imbatibles. Lucir unas uñas perfectas nunca ha sido tan fácil.