Te vas a sorprender, pero este sistema de eliminar el vello de raíz ya se usaba en… ¡la Prehistoria! Como es evidente, se ha ido perfeccionando con el paso del tiempo. Te explicamos cuál es la técnica perfecta para depilarse con pinzas, porque esa es la clave para que sea totalmente efectiva.
No nos vamos a olvidar de ningún detalle relacionado con este asunto de depilarse con pinzas. Se trata de que obtener los máximos resultados, claro. Pero, también, de desmitificar definitivamente el tema del dolor porque sigue siendo la mayor pega que se le pone a esta técnica. Y, no es tanto como parece.
Los pasos previos antes de depilarse con pinzas
Unas buenas pinzas, ese es el requisito imprescindible para que tu cejas queden perfectas. ¿Y cómo sé que cuento con las pinzas de depilación que necesito? Pues, para comprarlas tienes que fijarte en las puntas, deshecha las que sean romas ya que suelen pillar más de un pelo a la vez. Esto se traduce en más dolor para ti y menos eficacia.
Además, hay un cuidado previo antes de depilarse con pinzas que facilita la extracción del pelo. Se trata de limpiar bien la zona o, incluso aún mejor, realizarte una exfoliación suave de esa parte de la piel. Con ese sencillo gesto evitas el mínimo riesgo de infección y abres los poros, así se reduce el problema del vello enquistado.
Cómo conseguir las cejas perfectas
Aunque puede aplicarse a otras partes, siempre que el objetivo sea eliminar pelos uno a uno, lo cierto es que la elección de depilarse con pinzas se reserva para las cejas en la mayoría de las ocasiones. Es lógico porque es una zona pequeña, muy delimitada y que requiere gran precisión. Solo tienes que seguir estos pasos para asegurarte el resultado que buscas.
Lo primero, para aliviar las molestias es elegir bien el momento. Si aprovechas que acabas de salir de una ducha caliente, por efecto del vapor, tus poros estarán más abiertos y te dolerá menos. También lo consigues aplicando una toalla caliente en tu cara durante unos 5 minutos. Elige un lugar muy bien iluminado. Respecto al espejo, los profesionales recomiendan que no sea de aumento porque te impide tener una visión completa de la ceja y, al final, dejarlas desiguales o con un perfilado incorrecto.
Pero, el verdadero truco profesional consiste en tensar bien la piel. Usa los dedos para estirarla y no pellizcar involuntariamente la piel con las pinzas de depilar. Debes coger el pelo lo más cerca posible de la base, no en la punta, para que no se parta ni se deslice. Y, finalmente, tira del pelo siguiendo la dirección en la que nace. Solo queda aplicar alguna crema post depilatoria, con efecto hidratante y calmante para acabar de depilarse con pinzas.
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